QUIENES SOMOS
ARJA, Asociación Riojana de Jugadores de Azar en Rehabilitación es una Asociación sin ánimo de lucro que comenzó su andadura en 1.989 y se creó oficialmente en 1.990 y desde entonces, hasta la actualidad no ha dejado de atender a las personas con problemas de juego. Somos una de las asociaciones pioneras de España en trabajar en esta problemática.
En 1995 ARJA firmó un convenio con la Consejería de Hacienda que de una manera consecuente y voluntariosa decidió conceder una cantidad anual para paliar los daños producidos por el juego, ya que es esta Consejería la que recauda estos impuestos, y dedicarlos a la rehabilitación de las personas dañadas por el juego. Desde ese año y hasta hoy en día, el convenio se ha venido prorrogando todos los años con el envío previo de una memoria de actividades que supervisa y aprueba la Consejería de Salud.
- Concha Santo Tomás, psicóloga especialista en clínica, creó la Asociación y actualmente sigue funcionando más en la parte interna.
- Alejandra Calle psicóloga sanitaria especialista en Detección e Intervención en la Adicción a las Nuevas Tecnologías atiende profesionalmente al grupo de los jóvenes, realiza terapias individuales y/o familiares, es la autora de las guías de ARJA y lleva la coordinación de la Asociación.
- Paula Pombo psicóloga sanitaria especialista en terapia sistémica realiza las primeras entrevistas y atiende profesionalmente a los grupos tanto de familiares como de jugadores, lleva a cabo las terapias individuales y/o familiares cuando son necesarias.
Las primeras entrevistas son realizadas siempre por una profesional y las terapias de grupo siempre están dirigidas por una profesional de la psicología.
Contamos en los grupos con la valiosa e inestimable colaboración de exjugadores con años de rehabilitación que por voluntad propia deciden quedarse en la Asociación para ayudar como a ellos les ayudaron; y para dinamizar el grupo de familias, también contamos con familiares con larga experiencia en el problema y tratamiento del Trastorno de juego del marido, la mujer, el hijo, el padre, el hermano… La participación de estas personas es totalmente voluntaria y genera una dinámica grupal inigualable que contribuye al sentimiento de sentirse acompañados/as y comprendidos/as en todas las actuaciones de ARJA.